Símbolos
Esvástica
Simbolismo de la esvástica
La esvástica, también conocida como sauvástica, suástica, cruz gamada, wan, tetraskel o cruz cramponada, es un símbolo con la forma de una cruz cuyos brazos tienen la misma longitud y están doblados todos en la misma dirección. Algunas personas diferencian entre esvástica, si los brazos están guiados en sentido dextrógiro (girando hacia la derecha 卐) y sauvástica cuando los brazos están guiados en sentido levógiro (girando hacia la izquierda 卍). De esta forma, ambos símbolos forman un icoságono irregular, pues constan de veinte lados cada. El término esvástica proviene del sánscrito suastíka (स्वस्तिक en letras devanagari), que traduciría “muy auspicioso”, “que así sea”, “buena suerte”, “felizmente”, “¡que le vaya bien!”, “¡salud!” o “con éxito”, entre otras expresiones de saludo, gratitud y suerte.
La esvástica puede encontrar como un símbolo recurrente de las culturas y el arte india y romana. Así, se puede encontrar en representaciones gráficas de mosaicos y frescos, y en elementos decorativos de construcciones arquitectónicas, como frisos. En Oriente, se puede encontrar en China, Japón y Corea, tanto en tejidos como en porcelanas, baldosas y murales. Esta frecuencia en el mundo antiguo como elemento aislado, cuyo testimonio se puede hallar en las ruinas de la ciudad de Troya, fue desapareciendo paulatinamente en el arte románico y gótico posterior para instalarse como un patrón para superficies y bordes. Ejemplo de ello es la catedral de Amiens, en el norte de Francia.
La esvástica se puede encontrar en las diferentes culturas paganas europeas, tanto en su forma dextrógira como levógira. En la mayoría de estas, representaban los dos momentos esenciales de la vida: el nacimiento y la muerte, respectivamente. La esvástica también simbolizaba a los signos de Piscis y Virgo en la rueda zodiacal. De hecho, estos signos están puestos en un extremo y otro de la rueda, por lo cual la parten en dos semicírculos. El que va desde Piscis a Virgo representaba la encarnación y un ciclo de vida; mientras que el que va desde Virgo a Piscis representa el tiempo que hay entre una vida y otra. Por tanto, la rueda zodiacal es el símbolo de la eterna reencarnación de la vida.
Dentro del budismo, la esvástica representa el carácter wan (萬), que se puede traducir como “eternidad” o “todo”. Por ello se puede encontrar en el pecho de algunas figuras de Buda. Si bien al comienzo no había distinción por su dirección, luego de la mitad del siglo XX se usa la esvástica dextrógira, para que no sea asociada con el nazismo
Dentro del cristianismo, la esvástica era otra forma de la cruz de Cristo, la cual era utilizada en el mundo romano para evitar la persecución. Esta era conocida como cruz gamada, pues estaba compuesta por cuatro letras gamma (Γ). Cada una de estas representaba a uno de los escritores de los evangelios, por lo cual la esvástica simbolizaba a Cristo y al Nuevo Testamento. De esta forma, se puede encontrar la esvástica en tumbas y monumentos fúnebres cristianos de la catedral de Notre Dame y la Basílica de Santa Eulalia.
En la India y la religión hindú, la esvástica dextrógira representa a pravritti, la evolución del universo generada por Brahmá, dios creador de todo; mientras que la esvástica levógira representa a nivritti, la destrucción del universo provocada por Shivá, dios destructor del mundo. Por tanto, la esvástica es un símbolo del cosmos y de sus ciclos, por ello es símbolo también de los puntos cardinales, direcciones del todo.
Sin embargo, en Occidente la esvástica es conocida como un símbolo del nazismo. La Alemania nazi adoptó este símbolo en 1920, que se diferencia de las esvásticas anteriores en tanto está inclinada 45 grados. Este símbolo era utilizado anteriormente por los grupos nacionalistas de este país, conocidos como völkisch, quienes eran famosos por tener creencias esotéricas, místicas y neopaganas. De esta manera, dada su aparente relación con las culturas europeas del norte, fue adoptado como símbolo de la raza aria. Así, Adolf Hitler llegó a decir en su Mein Kampf (Mi lucha) que era el símbolo de la lucha que estaban teniendo los hombres arios por su victoria.
Símbolos
Sigilo
Simbolismo del sigilo mágico
El sigilo es un símbolo usado dentro de la magia y el esoterismo. El término sigilo proviene del vocablo latino sigillum, que se puede traducir como “sello”. Por esto también se conocen estos símbolos como sellos mágicos. Anteriormente, estos se utilizaban para convocar ángeles, demonios u otros personajes bíblicos y fantásticos; mientras que en la actualidad se utilizan como amuletos, como firmas para realizar pactos o como formas para realizar peticiones. Los sellos por lo general son cuadrados y contienen distintos motivos dentro o alrededor, aunque también los hay cuadrados y en forma de estrella o de inscripciones.
De esta manera, dentro de la magia ceremonial de la Edad Media, los sellos mágicos se usaban para invocar ángeles o demonios. Esta tarea sólo podía ser realizada por un mago. Para poder llevar a cabo la invocación con total éxito, estos debían leer grimorios, que era como se conocían a los libros que tenían toda la información relacionada con aquella magia. El ejemplo más conocido de este tipo de libros es La Llave Menor de Salomón
Según se creía, una vez que estas entidades eran invocadas por el mago, este tenía absoluto control sobre ellas. Uno de los métodos más utilizados para elaborar sigilos era a través de cuadrados mágicos (conocidos también como kameas). Estos disponían de unos números encerrados varias celdas, las cuales estaban organizadas en filas y columnas. Ello se debía a que cada número representaba un ser específico y significado simbólico. Así, se escribían números que dieron igual producto al sumarlos en filas, columnas y diagonales. También se unían determinados números con líneas rectas o curvas para crear figuras abstractas y mágicas.
Si bien el concepto de sigilo mágico es propio de la magia occidental, cuyos primeros registros se pueden encontrar en la Orden del Amanecer Dorado, quienes creaban sellos combinando colores, palabras, imágenes y figuras; el uso de símbolos y sellos mágicos se puede encontrar desde los primeros momentos de la humanidad, en la era neolítica. Así, pueden encontrarse ejemplos de esta tradición en los yantras del hinduismo, las runas mágicas de los nórdicos y los veves de los pueblos subsaharianos.
Pese a la antigüedad del empleo de los sigilos y símbolos mágicos, la popularidad de estos en la modernidad se debe al ocultista y artista inglés Austin Osman Spare, quien en medio del auge del Art Nouveau desarrolló una pintura cargada de simbolismos y significados ocultos. Además creó un método para crear sigilos mágicos a partir de la escritura y la pintura automática, técnicas aprehendida del surrealismo. Desde entonces, los sellos mágicos se extendieron por diferentes cultos y filosofías esotéricas del New Age, como la Magia del caos.
Egipcios
Cetro nejej
Simbolismo del cetro nejej
Los gobernantes del antiguo Egipto recibían el título de faraón, el cual fue obtenido por primera vez por Narmer (Menes), responsable de la unificación del Bajo y el Alto Egipto. El término faraón, proveniente del egipcio per aa (pr ˤ3), quiere decir “casa grande”, en referencia al Egipto unificado (conocido como Imperio Nuevo). Para simbolizar la autoridad que poseía sobre el todo el territorio egipcio, el faraón llevaba una serie de prendas y de símbolos que lo mostraban como descendiente de Narmer. Así, estos eran las coronas, el nemes, el ureo, el trono, la cola de león o toro, la barba postiza y los cetros.
El faraón podía llevar distintos cetros dependiendo del contexto específico en el que se encontraba. De esta manera, podía llevar u otro si estaba comandando una batalla, si estaba en su palacio o si estaba en una ceremonia espiritual. Cada uno de estos tenía un significado distinto. Así, el cetro sejem era utilizado por los faraones y los nobles para simbolizar el poder y la autoridad. Este tenía una forma similar a la de una pequeña espátula, pero con un grosor mucho mayor. El cetro nejej estaba relacionado con el dios Osiris y con su culto. Este tenía la forma de un mayal o de un flagelo, y representaba el poder del faraón sobre sus súbditos, a quienes podía golpear con este.
Por último, el cetro Heka era uno de los símbolos más característicos del faraón. Este tenía la forma de una vara mediana con una media luna en su extremo, similar a un gancho. Este cetro, similar al bastón que usaban los pastores pero con un tamaño mucho menor, representaba al faraón como pastor de sus súbditos, como aquel que dirige sus destinos y el de su reino. Por lo general, el cetro heka siempre iba a acompañado del Neje, y así se puede ver en distintas representaciones jeroglíficas y escultóricas. Para portarlos, el faraón usualmente cruzaba sus brazos sobre su pecho con el uno en una mano y con el otro en la otra. Además, se asociaba al cetro heka con Osiris y, por ende, con los poderes mágicos.
Además de los cetros anteriores, algunos faraones también llegaron a utilizar el cetro uas, también conocido como cetro was, era el bastón ceremonial que utilizaban los faraones del antiguo Egipto. Este bastón consistía en una vara recta que llevaba en su punta superior la cabeza de un animal fantástico y en la punta inferior un motivo ahorquillado. Al igual que otros bastones de mando y cetros, esta vara representaba el poder y la fuerza que tenía el gobernante sobre el mundo terrenal, y la proximidad y la iluminación que tenía con respecto al mundo espiritual, al mundo de los dioses y los muertos. El cetro de uas era, además de una extensión del propio faraón, el emblema de Neit, también conocida como Neith, la diosa del destino, la caza, el cosmos, la guerra, el agua, el parte, los ríos las madres. Por todos estos atributos, usualmente era relacionada con Atenea, la diosa griega del combate, la guerra, la civilización y la sabiduría.
Egipcios
Pabellón del jubileo
Simbolismo del pabellón del jubileo
El pabellón del jubileo era el nombre de un jeroglífico egipcio que representaba la Fiesta Sed, también conocida como Heb Sed o Fiesta de renovación real. Dicha fiesta era la celebración más importante del antiguo Egipto, y tenía por motivo la renovación de la fuerza física y espiritual del faraón. Registros sobre esta celebración se pueden encontrar en varios registros arquitectónicos, como la Piedra de Palermo. De tal forma que esta fiesta tuvo lugar desde la primera dinastía hasta el periodo Ptolemaico, cuando su nombre se tradujo al griego como Fiesta de los treinta años. Ello se debía a que varios faraones, como Amenhotep III o Ramsés II, realizaron esta celebración cuando cumplieron treinta años de gobierno y, después, la repitieron cada tres años.
A pesar de que lo usual era que la fiesta tuviera lugar tras los treinta años de gobierno del faraón, como en los casos ya mencionados, se sabe que hubo varias excepciones a esta regla
Pese a todo lo anterior, el orden que dictan las escenas encontradas en el Templo Solar de Abu Gurab, que narrarían la fiesta del faraón Nyuserra-Iny, son:
- Inicio de las festividades.
- El faraón revisa las edificaciones que se están construyendo y el ganado que se tiene.
- Se realiza una procesión en la que el faraón va vestido para la ocasión y en la que es acompañado junto a sus hijos.
- Se realiza la fiesta en el edificio principal, para lo cual se llevan figuras con forma de león.
- Personas de todo el reino se dirigen hasta el lugar donde está el faraón.
- Los egipcios se inclinan ante su faraón.
- Se realiza la procesión de Min, dios de la vegetación y la fertilidad.
- El faraón se llena el cuerpo con un ungüento y se pone la vestimenta adecuada para la carrera ritual, que parece ser el evento más importante de todo el festival.
- Se vuelve a hacer un censo del ganado.
- El faraón se sienta en la silla gestatoria.
- El faraón es llevado sobre la silla para una nueva procesión.
- El faraón construye un dyed (un pilar), el cual representa la estabilidad del reino. Tras esto, dispara una flecha a cada uno de los puntos cardinales para espantar a los enemigos.