Plantas
Cactus
Simbolismo del cactus
El cactus es un símbolo que se relaciona con las personas. Estos se recubren de espinas para impedir que los animales se acerquen, de la misma forma que una persona puede buscar la forma de ahuyentar a los demás. Pese a esto, muchos cactus exhiben con el tiempo hermosas flores, simbolizando así la belleza que puede estar oculta en una persona a la cual no es fácil conocer o tratar. Según reza el Feng Shui, los cactus atraen el reconocimiento y el éxito laboral, razón por la cual se puede encontrar en oficinas y lugares de trabajo. Además de este significado inmaterial, se cree que absorben la radiación de los monitores.
Dado que son plantas que necesitan de muchos cuidados (salvo la sobrehidratación y los hongos), son excelentes regalos para aquellas personas que quieren comenzar en el mundo de la floristería o que buscan una planta pero no saben cómo cuidarla. Este regalo es traducido en algunas culturas como un símbolo de fortaleza interior y paz, por lo cual se regala a aquellas personas que están pasando por un momento difícil en sus vidas. No está de más recordar que los cactus deben ser regados al menos una vez cada veinticinco o treinta días, pues pueden secarse como cualquier otra mata.
En los pueblos originarios de la provincia argentina de Catamarca, el cactus es un símbolo de amor. Esto se debe al mito de Munaylla, que traduce “hermosa”, la hija del cacique huasán. En aquella época, los huasanes estaban en guerra contra los mallis. Muna ylla estaba en contra de este enfrentamiento, así que trataba de buscar la paz entre ambas tribus
Plantas
Nenúfar
Simbolismo de los nenúfares
Los nenúfares son las plantas acuáticas que despliegan flores sobre la superficie de los lagos, charcos, lagunas y demás fuentes hídricas estancadas o de corriente lenta. De estas plantas se distinguen dos tipos: unas cuyas raíces llegan a medir hasta cuatro metros y medio o cinco de largo; y otras que son más pequeñas y que por lo general se mantienen flotando sobre la superficie del agua. Dado que estas plantas se pueden encontrar en la mayor parte del mundo, tanto en América y Europa, como en África y Asia. Tal vez la más representativa de todas estas flores es el loto, dotada de múltiples significaciones en el Oriente.
En el mundo antiguo, los egipcios adoraban a los nenúfares que crecían y florecían sobre la superficie líquida del río Nilo, en sus regiones más tranquilas. A estas las denominaban como lotos, aunque no se trataba de las flores del género lotus a las que estamos acostumbrados. Dado que esta flor se abría de noche y se cerraba en la mañana con la llegada del sol, se creía que representaba la muerte y la separación que había entre las deidades de su panteón. Debido a esto, el loto era utilizado en rituales y ceremonias, e incluso se agregaba a los arreglos funerarios. Estudios posteriores han descubierto que el loto egipcio tenía propiedades psicodélicas, por lo cual se explicaría su relación con las actividades espirituales.
Además de este uso ritual, cuyo ejemplo se puede encontrar en los lotos descubiertos en la tumba de Ramsés II, el loto era utilizado por los egipcios como un modelo para la construcción de sus templos. Así, las columnas se hacían con la forma de los tallos raíces del papiro y el loto. Ello se debía a que estas plantas emergían desde el suelo pantanoso hasta la superficie. De igual forma, las columnas se fijaban al suelo y se levantaban hasta el cielo, uniendo el mundo terrenal y celestial o sosteniendo el cielo desde la tierra.
Dentro de la glíptica maya, el nenúfar es una manifestación de la fertilidad, pues es una planta capaz de florecer en medio de los pantanos; y también es un símbolo de la abundancia, pues normalmente no crece una so la en un lago, sino que muchas veces llenan la superficie de este
Mientras tanto, para los dogon, en Malí, el nenúfar cumple la función de la leche materna de las mujeres. Así, se le relaciona con los senos y el torso. Por ello se les dan hojas de nenúfares a las mujeres lactantes para mejorar su leche. De igual forma, estas hojas se le da al ganado que no ha parido para aumentar su producción y fertilidad. Todo esto tiene su origen en el mito morueco en donde el sol baja en forma de arco iris a la tierra y se sumerge en un pantano lleno de nenúfares, gritando que, a partir de ese momento, la tierra es suya.
El confuciano Zhou Dunyi llegó a decir que le gustaba la flor de Loto porque, a pesar de que crecía en medio del barro, sus pétalos se abrían completamente limpios. Por esta razón, pueden verse varias autoridades asiáticas sentadas sobre la flor, representando así su divinidad. Para los budistas, la flor representaba la pureza de la mente, el habla y el cuerpo en medio de las aguas sucias de los deseos corporales y el apego a lo terrenal. Incluso se llegó a decir que, por lo lugares por los que caminaba Buda Gautama, nacían varias flores de Loto. En la actualidad, el Loto puede encontrarse en la bandera de la Región Administrativa Especial de Macao.