La leyenda del Jinete sin cabeza

Según cuentan los enterados, en un pueblo muy apartado de las grandes concentraciones urbanas, la gente siempre comentaba que había visto en la noche y por los alrededores a un jinete cabalgando sobre un hermoso caballo a toda velocidad. Las personas se preguntaba entonces qué asuntos tenía ese hombre siempre tan tarde, pues era algo inusual en la región que alguien siguiera despierto a tales horas y, más aun, que anduviera en caballo. Así, se esparcieron toda clase de rumores hasta que, una noche en la que el cielo estaba atravesado por relámpagos, el jinete fue visto por alguien y luego desapareció, de la nada; y no volvió a saber se de él hasta pasados varios años. La gente del lugar incluso ya lo había olvidado.

De tal manera que en una noche idéntica a la de su desaparición, alguien corrió hasta el pueblo y afirmó que había oído los cascos de un caballo donde el jinete solía pasar. Muchas personas salieron de sus casas para comprobar si lo que decían era cierto, y en efecto, se podía escuchar una cabalgata allá lo lejos; pero podía verse absolutamente nada por la oscuridad

. De repente, cayó un relámpago que iluminó al jinete que hasta entonces había pasado por invisible, y la muchedumbre se horrorizó al ver que no tenía cabeza. Llenos de pánico, todos los habitantes corrieron hasta sus casas y no volvieron a salir sino hasta que ya se hizo de día. A partir de entonces, hay quienes aseguran que, en medio de la noche, se puede ver corriendo a un caballo en la llanura que lleva a un hombre encima. Si uno se fija con la suficiente atención, puede percibir que el jinete no tiene cabeza.