Grillo

Grillo (símbolo)

El grillo es un símbolo recurrente en la tradición china. Dado su ciclo de vida, compuesto por tres fases: huevo, larva e imago; los chinos veían en este animal el símbolo de la vida, la muerte y la resurrección. Por esta razón, era bien visto que un grillo entrara en la casa o se acercara a una persona, pues significaba que pronto iba a ser dichoso o iba a tener suerte en sus empresas. Esta interpretación también se puede rastrear en las culturas del mediterráneo, aunque su fijación era menor. Los chinos llegaron incluso a encerrar a los grillos cantores en jaulas de oro o cajas especiales. Algunos hasta organizaron peleas de grillos. De esta forma, se tiene una primera imagen del grillo como símbolo de prosperidad, suerte y alegría.

En algunos relatos, el grillo también aparece como un contador de historias o un portador de sabiduría debido a su canto. Por ello no es raro que la conciencia de Pinocho sea un grillo. Algunas personas creían que, cuando dejaba de cantar, era porque algo malo estaba a punto de suceder. Y por eso se tenía la creencia de que era igual o mejor guardián que un perro, pues cuando alguien entraba en la casa de alguien con un grillo, este se quedaba en silencio.

Dada su relación con la humedad, también se le creía portador de lluvias y se pensaba que su alimento eran las gotas del rocío. Según un mito griego, Titono, también conocido como Titón, era un hombre muy hermoso, hijo del rey troyano Laomedonte. La diosa Eos se enamoró de él y le pidió a Zeus que le otorgara la inmortalidad para poder vivir con él en el Olimpo. Zeus accedió, pero la diosa se dio cuenta de que había olvidado pedir la eterna juventud también. Así, Titono fue haciéndose viejo con el paso del tiempo hasta hacerse diminuto y arrugado, adoptando la forma del grillo. Es por ello que Eos

, conocida como la diosa de la aurora, se levanta cada mañana y llora sobre la tierra, produciendo el rocío del cual se alimenta este animal.