Andrómaca

La leyenda de Andrómaca, mitología griega

Dentro de la mitología griega, Andrómaca fue la esposa del príncipe troyano Héctor, con quien tuvo por hijo a Astianacte. Andrómaca era hija de Eetión, rey de Tebas, lugar donde creció junto a sus hermanos. No obstante, durante el sitio de la ciudad de Troya, Aquiles asesinó a toda su familia por prestarle apoyo a los troyanos. Andrómaca se quedó sola hasta que llegó Héctor, quien la tomó por esposa y la llevó a su ciudad. Juntos, tuvieron uno de los matrimonios ideales de la cultura griega, en contraste con la relación sostenida por Paris y Helena. No obstante, dado que Héctor era uno de los guerreros más fuertes de su ciudad, dicha felicidad no duraría mucho. A pesar de que los hombres de Aquiles tenían prohibido luchar, Patroclo se colocó la armadura de su compañero y salió a la batalla. Logró entonces matar a Sarpedón, hijo de Zeus, y a algunos troyanos más; pero no corrió la misma suerte al enfrentarse a Héctor, hijo de Príamo. Este príncipe troyano asesinó a Patroclo pensando que era Aquiles, pero, cuando le quitó las armas y el casco, se dio cuenta de la verdad.

Aun sabiendo que Aquiles lo buscaría para vengar la muerte de Patroclo, Héctor volvió al campo de batalla. Cuando Héctor se dispone a salir de la ciudad para encabezar las fuerzas troyanas, es detenido por Andrómaca y su hijo, quienes le suplican que no vaya a la guerra; pero este, luego de consolarlos, sale de todos modos.

Mientras Tetis, la madre de Aquiles, le daba ambrosía y néctar al cuerpo de Patroclo para que no se descompusiera; Aquiles logró derrotar a Héctor sin mayores dificultades. Amarró el cuerpo de este a su carro y lo arrastró por varios días hasta que, en una noche, el mismo Príamo se acercó a la tienda de Aquiles y le pidió el cuerpo de su hijo. El guerrero aqueo queda conmovido por la acción del rey, así que le entrega el cuerpo de Héctor y este puede ser finalmente velado. De esta forma, Andrómaca se quedó sin más compañía en el mundo que su hijo Astianacte.

Luego de que la ciudad de Troya es saqueada y destruida, el heraldo Taltibio les informó a los griegos que debían sacrificar al hijo de Andrómaca. Entonces Neoptolemo, hijo de Aquiles, arrebató a Astianacte de las manos de Andrómaca y lo arrojó desde lo alto de las murallas de la ciudad de Troya. Luego de ello, Neoptolemo esclavizó a Heleno, hermano de Héctor, y volvió a Andrómaca como su concubina, teniendo por hijos a Moloso, Pielo y Pérgamo. Una vez murió Neoptolemo, se casó con Heleno y ambos gobernaron sobre Epiro, teniendo como descendiente a Cestrino.