Leyenda del hombre pez de Liérganes, narración de Cantabria, España.

La leyenda del hombre pez está basada en la vida de joven Francisco de la Vega, hijo de Francisco de la Vega y María de Casar. Según cuenta la leyenda el joven desapareció mientras nadaba en un río en Bilbao, antes de San Juan; años más tarde apareció en Cádiz, con escamas en su cuerpo. Sin entender lo que había pasado el joven este regresó a Liérganes, donde poco tiempo después volvió a desaparecer en el mar.

Leyenda

Cuenta la leyenda que hacia mediados del siglo XVII en Liérganes, vivían Francisco de la Vega y María de Casar, quienes tenían cuatro hijos. Cuando Francisco falleció, la viuda envió a su hijo del mismo nombre a Bilbao, para que aprendiera el oficio de carpintero. Estando en Bilbao, Francisco fue a nadar con unos amigos antes del día de San Juan, mientras se divertía fue llevado por una corriente, tras lo cual desapareció sin dejar rastro.

Cinco años después algunos pescadores vieron en las aguas a un ser acuático parecido a un humano, el cual desapareció rápidamente; por varios días fue vista la extraña criatura en las aguas de Cádiz.

Hasta que cierto día, un grupo de pescadores consiguió capturar al extraño ser con una red y trozos de pan. Una vez capturado, los hombres pudieron constatar que este era un humano con escamas en su cuerpo. Después de esto fue llevado al convento de San Francisco donde fue interrogado, al cabo de un tiempo el joven tartamudeo una palabra: Liérganes.

Tras escucharle les tomo bastante tiempo averiguar, que se trataba de un pueblo cercano a la costa santanderina.

El convento solicitó información sobre sucesos extraños ocurridos en los últimos años en el pueblo del joven, desde el cual les contestaron que lo único extraño registrado era la desaparición del joven Francisco de la Vega, cinco años atrás. Tras esto el fraile, Juan Rosendo acompañó a Francisco a Liérganes, para comprobar si era cierto que era de allí. Al llegar Francisco se adelantó y fue directo a la casa de su madre María de Casar, quien le reconoció como su hijo.

Una vez en casa de su madre, Francisco vivió tranquilamente sin mostrarse interesado por nada, apenas hablaba, caminaba desnudo y a veces no comía. Después de vivir por alrededor de nueve años de esa manera, el joven volvió a desaparecer en el mar.

Desde entonces nada se sabe sobre este. En honor a este mítico personaje de la mitología de Cantabria, existen numerosos sitios turísticos, tales como, el Paseo del Hombre Pez, la escultura del Hombre Pez y el Centro de interpretación del Hombre Pez, todos estos ubicados en Cantabria (España).